Partamos del mítico «no me estoy riendo de ti, me estoy riendo contigo». Somos conscientes de que existe una diferencia realmente espectacular en esta frase dependiendo de si coges la primera parte o la segunda. Pues bien, eso es lo…
Partamos del mítico «no me estoy riendo de ti, me estoy riendo contigo». Somos conscientes de que existe una diferencia realmente espectacular en esta frase dependiendo de si coges la primera parte o la segunda. Pues bien, eso es lo…